Estimadas familias

Las y los profesores de Chile les saludan afectuosamente, e informamos que nuestra Asamblea Nacional decidió iniciar una paralización indefinida a partir del lunes 03 de junio. La principal razón de esta drástica decisión es manifestar nuestro rechazo al notable abandono, por parte de este gobierno, de nuestra Educación Pública a la cual tenemos como obligación y compromiso ético defender por el bien de quienes son nuestros estudiantes, sus hijos e hijas, por el bien de nuestro país.

Antes de llegar a esta decisión hemos realizado responsablemente un diálogo y negociación constante con el Ministerio de Educación, que se inició en Abril de 2018, cuyo objetivo fue buscar soluciones a los serios problemas que enfrenta nuestra educación pública, tales como: colegios con plagas de ratones que por meses no se resuelven, deterioro severo en la infraestructura, clases en salas con temperaturas extremas, carencia de insumos básicos, entre otras graves situaciones que hacen de algunas de nuestras escuelas lugares poco acogedores y hostiles, lo que termina dificultando severamente la obtención de buenos aprendizajes.

También expusimos la necesidad de cambiar la perversa lógica de estandarización de nuestra educación que genera enorme agobio en las comunidades educativas y que ve a nuestros alumnos como un número; para nosotros los estudiantes son personas, no un producto al cual hay que exprimir rendimiento a como dé lugar.

Como cierre de esta larga etapa negociadora, queremos recalcarles que el Gobierno entregó una respuesta que es simplemente un rechazo rotundo a cualquiera de estas mejoras planteadas, que también incluyen algunos de nuestros derechos laborales pisoteados, como por ejemplo, la inestabilidad laboral, la enorme sobrecarga de trabajo administrativo que nos resta tiempo y energía para atender a sus hijos, el absurdo de tener una doble evaluación docente, la inaceptable demora en cancelar el bono de retiro a nuestros colegas en edad de jubilar; la deuda histórica que es una enorme injusticia con nuestros colegas más antiguos, entre otras.

Finalmente, se agrega a nuestras demandas, el rechazo a la aberrante modificación curricular que se anunció en estos días para 3° y 4° medio, donde se establece la eliminación de Historia, Educación Física y Artes como asignaturas obligatorias, lo cual implica un severo daño a la buena formación de nuestros jóvenes, apuntando a la existencia de generaciones completas sin identidad histórica, sin buena salud física y mental y sin un adecuado desarrollo emocional.

Nos gustaría indicarles que la mayoría de las soluciones planteadas a la autoridad no implican aumento alguno al presupuesto de la nación, sino la simple VOLUNTAD POLÍTICA por parte del gobierno de querer resolver este conflicto.

Esperando su comprensión y apoyo, los invitamos a dialogar y participar junto a nosotros con el objetivo de acelerar la búsqueda de una pronta solución a este conflicto, de tal manera que podamos retomar en mejores condiciones el objetivo de construir una mejor Educación Pública para todas y todos.

Atentamente

Profesoras y profesores de Chile.